UNA EXCURSIÓN SIN
RESPUESTA (Dedicado al ARA SAN JUAN)
Sube la marea…
Cuarenta y cuatro
fantasmas
acuerdan superar las
sendas de la niebla
en la trinchera azul
del suelo vertical.
Sus pensamientos braman
en lo oscuro.
El plan arrinconado en
el vasto escondite,
y la proporción áurea de
la desesperanza,
llegan a la orilla con
desaliento…
barren corrientes de dolor.
Conjeturas inútiles plagadas
de saliva
acuñan un proyecto
denso.
Voces que ironizan
ánimo, responden disonantes.
Los fantasmas sordos, columpian
un estruendo en memorias argentas.
que palpita en
laberintos.
Atorados reflectores… enfocan.
El mapeo se deshace en
madejas.
Abortivas búsquedas
siguen en blanco,
como la espuma y la
tristeza que fuga entre las algas.
Murciélagos marinos, que
la tierra no quiso,
empujados a un mar de
lágrimas agónicas.
Tripulantes que habitan
el acero quemado,
las esperanzas truncas,
el círculo de ardor y de
congoja
que da vueltas encadenado
al fondo,
con grilletes de
escamas.
No llega rimando la ola
del alivio…
Zozobras descosieron carnadas lastimeras
que enhebraban el
“nunca más.”
SUSANA RODRIGUES
TUEGOLS
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